Desde el andén de la estación.

Como bien sabes querido maestro la despedida perfecta es una utopía. Mientras permanezco sentado en ese banco de la estación donde nos dijimos adiós, me he puesto a pensar en voz alta en eso, en el adiós.
Existen muchos tipos de despedidas, la deseada y la despreciada, la planificada y la repentina, la celebrada y la dolorosa… en todas algo se te acaba, en todas algo o alguien se va y en todas te queda la sensación de que algo te quedó por hacer. Es por estas circunstancias comunes, por lo que las despedidas pueden ser mejores o peores pero jamás se situarán en la perfección.

Las despedidas tienen, en su inmensa mayoría, otro denominador común: el periodo de reflexión que se inicia casi desde el momento en el que se plantea que va a existir esta. Cuando esto ocurre se reflexiona sobre aquello que va a finalizar, sobre cómo fue la duración del hecho en cuestión. Y he de reconocer que el análisis que se produce durante la misma suele ser realizado desde el lado más positivo, supongo que debe ser algún tipo de mecanismo de autodefensa, algo que te hace el trámite más llevadero y es por ello que cuando se analiza lo pasado, se hace con nostalgia y añorando lo positivo, de alguna manera lo más feo se oculta a la mirada de los recuerdos.
Cuando supe la posibilidad de que en breve partirías, en mi cabeza se agolparon un bombardeo de recuerdos sobre situaciones vividas y una angustia sobre el hecho de sacar el cien por cien del tiempo que te quedaba hasta tu partida (el cien por cien es otro de los conceptos utópicos de nuestro lenguaje). Del mismo modo, como suele ocurrir en casi todas las despedidas, de repente piensas que quizás te quedó algo por decir, un te quiero o un lo siento o que quizás te quedó algo por hacer, un abrazo o un beso de complicidad, pero ese quizás deja abiertas demasiadas ventanas y la gente inteligente como tú, experta en leer entre líneas, experta en descifrar miradas, seguro que sintió los “te quiero”, los “lo siento”, los besos y los abrazos que quizás no se llegaron a materializar. De todas formas algunos creemos que siempre hay medios para remediar lo que quedó por hacer antes de esa despedida.
Hasta la vista y espero que estas líneas sean de tu agrado.



Comentarios

  1. QUE SERÍA DE NOSOTROS SIN UNA DESPEDIDA, SIN UNA BONITA O FEA Y ASQUEROSA DESPEDIDA...TODO COMIENZA Y TODO ACABA...AUNQUE SIEMPRE LLEGAMOS TARDE A LAS DESPEDIDAS...EN FIN...

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